- Una Central Térmica de Ciclo Combinado se basa en una turbina de gas y en el posterior aprovechamiento del calor residual a través de un ciclo de vapor.
- Una turbina de gas funciona mediante calentamiento por combustión del aire comprimido por un compresor, acoplado a la propia turbina (Ciclo Brayton).
- Al expandirse los gases en la turbina se produce un trabajo que es convertido en energía eléctrica por el alternador.
El combustible principal es, en general, gas natural. Los gases que salen de la turbina de gas se encuentran a temperaturas superiores a los 600°C. Su calor es aprovechado en una caldera de recuperación para producir vapor que, a su vez, al ser expandido en una turbina de vapor, produce trabajo que igualmente es convertido en energía eléctrica (Ciclo Rankine).
Esta combinación de ambos ciclos mediante la turbina de gas y la turbina de vapor, permite un mejor aprovechamiento del calor de combustión, obteniéndose un rendimiento global, en general, superior al 55%, mientras que en las centrales térmicas convencionales se consigue un 35%.